Aseguran que solo tienen binestarina para pasar las tres comidas del día.
Hay incertidumbres en el corregimiento San José de Mulatos, subregión del Urabá antioqueño, por cuenta de la difícil situación que viven por lo menos 85 personas, representadas en 39 familias que, para este viernes, piden a la Gobernación de Antioquia mayor atención tras la erupción del volcán Los Aburridos.
De acuerdo con Carlos Mario Talegua Pacheco, fiscal de la comunidad indígena Zenú Malambo, las familias, 18 días después de la erupción del volcán, se niegan a volver a sus territorios por el susto que vivieron la tarde del pasado 11 de noviembre.
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Talegua manifestó que, en este momento, todas las personas afectadas permanecen asentadas en dos albergues, uno de ellos ubicado en la vereda Santiago de Urabá y en el corregimiento de San José de Mulatos.
El líder social y fiscal de la comunidad indígena expresó su preocupación, pues según él, la Gobernación de Antioquia los tiene olvidados. Incluso, en este momento ya no tiene mucho para alimentarse, luego de recibir hasta 15 kits de ayudas alimentarias.
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Desde allí, otras de las preocupaciones son los más de 45 niños indígenas que, por las difíciles situaciones estarían aguantando hambre, pese a la poca atención, según la comunidad, por cuenta de la erupción del Volcán Los Aburridos, en el Urabá antioqueño
Así fue la erupción del volcán
Antes la alerta y primera atención, desde la Gobernación de Antioquia informaron que, una vez conocida la situación, instalaron un Puesto de Mando Unificado con autoridades locales de Turbo, Necoclí y San Pedro de Urabá, Bomberos locales, Gobernación de Antioquia y la Fuerza Aérea Colombiana.
Además, entregaron el primer informe preliminar, indicando que 109 familias resultaron afectadas, entre ellas 65 indígenas, 35 campesinas y 9 familias que viven cerca de la carretera, las cuales fueron trasladadas de la zona de manera preventiva a instituciones educativas.